Le decía un papá a su niña mientras la tomaba en brazos y con voz queda:
- Mira la luna...
- ¡
Uy, que susto!
Vienes a nuestro recuerdo
frecuentemente y eres fuente de inspiración;
dires y
diretes (muchos de cosecha propia) y un uso preciso y en
desuso del lenguaje.
Hasta siempre, don Giovanni.